Cómo hacer Polvo de Apio
Este es un ingrediente que con toda probabilidad te va a costar encontrarlo reducido a polvo en supermercados comunes, quizás en internet tengas más accesibilidad. Sin embargo puedes hacértelo tú mismo-a y para ello todo lo que vas a necesitar es un buen ramillete de hojas de apio.
El procedimiento para hacer el Polvo de Apio es el siguiente.
Para liberar a las hojas de apio de todos los agentes tóxicos que puedan traer vamos a ponerlas en remojo en agua con una cucharada de bicarbonato y un chorro de vinagre durante al menos dos horas.
Luego lo escurriremos bien y procederemos al secado.
Para secar el apio puedes usar una deshidratadora, las hay muy económicas en el mercado, o bien puedes usar tu horno de casa a 50 grados centígrados durante al menos 6 o 7 horas, debes ir controlando porque debe quedar absolutamente seco para que no se corrompan las mezclas que haremos más tarde.
Una vez que tienes tus hojas de apio completamente secas puedes proceder a molerlas. En este caso puedes usar tu termomix o un molinillo de café para dejarlas reducidas a polvo, totalmente micronizadas.
Puedes almacenar este polvo en un tarro de cristal hasta su posterior uso en otras recetas. Os adelanto que os daré una receta abrecaminos usando este polvo y los anteriores que he publicado.
Espero que os haya gustado y lo compartáis con vuestros amigos. Gracias por leerme.