MECANICA DE UN HECHIZO
Un hechizo es un deseo que trabaja con la naturaleza, con los elementos de la manifestación. Estos elementos están por todas partes, ya que son elementos básicos de la vida: fuego, tierra, aire y agua. Para que sea real debe tener el poder de estos cuatro elementos.
Cuando ya tienes tu deseo fijo, es decir, que tienes claro lo que deseas conseguir, hay que convocar a los símbolos de cada elemento. Por ejemplo, si queremos tener éxito al tomar una decisión deberíamos encender una vela azul porque su llama representa el elemento fuego y el color azul brinda claridad y poder al intelecto.
Se deberían también elegir plantas o flores cuyos poderes contribuyeran a tomar la decisión correcta y representan además al elemento tierra.
El agua es el elemento de las emociones, estaría presente en el recipiente donde estén las plantas o las flores.
Nuestra voz cuando expresamos en voz alta las palabras del hechizo representarían el aire. También es posible poner algún sahumerio de inciensos para representar este elemento.
La magia no es algo racional, sino que es una forma de acoplar la creatividad al caos del universo.
Para que los hechizos funcionen no hay que fijarse tanto en entender el cómo y si confiar simplemente de que podemos influir en conseguir lo que queremos con el poder de nuestra intención.