Crear un embrujo de protección
Como mencionaba en el artículo anterior es posible incrementar la noción del poder personal mediante un hechizo y ocasionalmente en combinación con un embrujo.
Un embrujo es una forma de energía que proyectamos sobre nosotros mismos y que actua bien como fuerza protectora o bien como fuerza de atracción dependiendo de lo que necesitemos.
Un ejemplo de uso:
Vamos a imaginar que tenemos que hacer frente a una entrevista de trabajo y que realmente queremos ese empleo, bien, pues podríamos hacer primeramente el hechizo para incrementar nuestro poder personal y además potenciarlo con el embrujo de protección para que la persona que nos entrevista nos vea como potenciales candidatos a ese puesto, el empleado ideal.
El arte de algunos hechizos consiste en crear la situación de antemano pero luego solo es cuestión de pasar directamente a ella. ¿Eres consciente de tu poder? ¿Sabes sacarle provecho? Te invito a la reflexión y a que lo pongas en práctica.
Crear un embrujo de protección
Siéntate en una habitación a oscuras en cualquier momento del día.
Vas a hacer acopio de toda tu energía usando la respiración. Vamos a inspirar profundamente, relajadamente y llenando los pulmones al máximo intentando respirar desde el diafragma y luego vamos a soltar lentamente en 4 tiempos el aire. Realizar estas respiraciones varias veces.
Cierra los ojos y con la imaginación vas a crear un tubo de luz que proviene del universo, de la fuente original de energía, de nuestro creador. Es un tubo de luz que penetra por nuestra cabeza y llena hasta el ultimo rincón de nuestro cuerpo sin dejar un milímetro libre de esta luz potente de color blanco. Una vez que nos hemos llenado por dentro de esta luz la vamos a expandir al exterior envolviéndonos en un huevo de luz blanca. Este huevo será nuestro escudo protector, el blanco nos va a proteger y a ofrecer un escudo de invisiblidad.
Rodeando a este huevo áurico de color blanco vamos a crear otro de color rosado que es el color del amor sincero porque combina el rojo y el blanco lo que lo convierte en una vibración más alta.
Después vamos a rodear el huevo de luz rosada de otro de color azul, el color de la protección y seguidamente cubriremos con otro de color dorado. Este nos va a proporcionar sabiduría, claridad mental, lucidez y un grado máximo de perfección espiritual.
Para concluir, vamos a rodear este campo de luz dorada con uno de luz morado que va a transmutar todo lo negativo en positivo y va a impedir que todo lo negativo externo llegue a nosotros y lo absorbamos.
Una vez concluido este ejercicio ya podemos abrir los ojos y vamos a intentar proyectar nuevamente este escudo de luz de colores a nuestro alrededor.
Ya estaremos listos para salir de casa y afrontar cualquier reto o situación que requiera protección.
Como nota adicional nosotros podemos practicar este mismo ejercicio usando los colores con los que más nos identifiquemos y con los que más seguros y protegidos nos sintamos.
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